Tipos de procedimientos judiciales en España y qué implica cada uno

El sistema judicial español contempla diferentes tipos de procedimientos judiciales, cada uno adaptado a la naturaleza del conflicto y la cuantía en disputa. Comprender cómo se estructura cada uno es clave para afrontar cualquier proceso legal con claridad y eficacia. En este artículo te explicamos los principales procedimientos judiciales en España, sus características y cuándo se utiliza cada uno.

Procedimiento ordinario

El procedimiento ordinario es el más común dentro de la jurisdicción civil cuando la cuantía del litigio supera los 6.000 euros. También se utiliza cuando lo establece expresamente la ley, independientemente del importe económico.

Se inicia mediante demanda con abogado y procurador, y suele incluir audiencia previa, práctica de pruebas y vista oral. Es un proceso más largo y formal que otros procedimientos, pero también más completo, ideal para conflictos complejos.

Procedimiento verbal

El procedimiento verbal se aplica en asuntos cuya cuantía no supera los 6.000 euros, así como en casos expresamente regulados (como desahucios, reclamaciones de rentas, tutelas posesorias o derechos reales limitados).

Su principal ventaja es su rapidez. Aunque también requiere abogado y procurador cuando la cuantía es superior a 2.000 euros, suele resolverse en una única vista. Es ideal para resolver cuestiones sencillas de forma ágil.

Procedimiento monitorio

El procedimiento monitorio es una vía rápida para reclamar deudas dinerarias vencidas, líquidas y exigibles, siempre que estén justificadas con facturas, contratos, albaranes o documentos similares.

No se necesita abogado ni procurador para iniciar el procedimiento si la cuantía es inferior a 2.000 euros. Si el deudor no responde o no paga en el plazo legal, se puede iniciar automáticamente una ejecución judicial.

Procedimiento cambiario

Este procedimiento está diseñado para exigir el pago de títulos valores como cheques, pagarés o letras de cambio. Es una vía muy eficaz para que el acreedor pueda obtener rápidamente el embargo de bienes del deudor.

Requiere presentar el título original y seguir un procedimiento similar al monitorio, pero con especialidades que protegen los derechos del tenedor del título valor. Se tramita por el juzgado competente del domicilio del demandado.

Procedimiento de ejecución

El procedimiento de ejecución se utiliza cuando ya existe una sentencia firme, un laudo arbitral o un título ejecutivo que no ha sido cumplido voluntariamente.

Este procedimiento tiene como fin hacer cumplir forzosamente una obligación, ya sea mediante embargos, subastas o medidas cautelares. Es una etapa clave si el deudor se niega a pagar tras perder un juicio.

Procedimiento penal

En el ámbito penal existen dos vías principales: el procedimiento abreviado (para delitos con penas inferiores a 9 años de prisión) y el procedimiento ordinario (para delitos graves).

Ambos incluyen fases de instrucción, apertura de juicio oral y sentencia. También existen procedimientos especiales como el juicio rápido (para delitos flagrantes) o el procedimiento ante el jurado (para ciertos delitos como homicidio o allanamiento de morada).

Conclusión

Conocer los tipos de procedimientos judiciales en España es fundamental para saber qué esperar en caso de iniciar una acción legal o recibir una demanda. Cada tipo implica requisitos distintos, plazos específicos y diferentes niveles de complejidad.

Contar con la orientación de un procurador en Zaragoza puede marcar la diferencia entre un proceso fluido y una experiencia judicial complicada. Si necesitas representación procesal o tienes dudas sobre qué vía legal corresponde a tu caso, no dudes en contactar con nuestro equipo.

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